Episodio 3: En el que te enseñamos, cómo convertirte en Ironman
Podemos definir la hormesis como una respuesta adaptativa que dan las células y organismos a un estrés moderado.
Es decir, nuestro cuerpo tiene la capacidad de adaptarse a los estímulos estresantes a los que se enfrenta. Para poder hacerlo, necesita que la dosis sea la adecuada:
– Una dosis muy alta, hará que no pueda adaptarse y se lesione.
– Una dosis muy baja, hará que no lo estimule para adaptarse.
En el ejercicio se produce esta adaptación, pero es diferente en función del tipo de ejercicio que hagamos: en el ejercicio de fuerza, el cuerpo se adapta a soportar tensiones musculares y a recuperarse de la carga. En el ejercicio de resistencia, el cuerpo se adapta a conseguir energía, tolerar y usarla durante un periodo de tiempo más largo.
Se ha estudiado su uso en la salud y se ha observado que someter al cuerpo a dosis controladas de estrés nos ayuda a envejecer mejor, a hacer el cuerpo más tolerable y fuerte, beneficia diversos sistemas y tejidos del cuerpo humano. También se cree que puede ralentizar patologías crónicas, pero eso aún está en estudio.
No tenemos la armadura de Ironman, pero tenemos un cuerpo tan increíble como ésta.